16 octubre 2008

Remake Aerolíneas Argentinas: Y van...

Y SIGA, SIGA EL BAILE

Que no se pusieran de acuerdo era lo más probable, mucho más cuando comenzaron a trascender los resultados de las tasaciones del Credit Suisse por un lado y por el Tribunal de Tasaciones de la Nación por el otro.

Lo que no se esperaba era que la diferencia fuera tan amplia.

Para el Gobierno la empresa tiene un valor negativo de U$S 600 millones, en tanto que para los españoles el paquete accionario tiene un valor de entre U$S 250 y 400 millones (más para Austral que para Aerolíneas), según al precio que se tome para el petróleo.

Ambas entidades utilizaron métodos distintos para hacer su trabajo.

La empresa sostiene que lo correcto -y lo que aparentemente está volcado en el Acta Acuerdo firmada por Julio De Vido, ministro de Planificación, y Ricardo Jaime, secretario de Transporte- es hacerlo a través del flujo de fondos a futuro. Según este acuerdo, ignorado por los legisladores, ahora se debería recurrir a un tercer tasador independiente cuyo falló sería inapelable.

Una alternativa imposible de digerir para el Gobierno después del periplo por el Congreso.

También las Asambleas de Accionistas convocadas para este martes para aprobar el balance 2007 y el balance de corte a julio del 2008, terminó sin la probación de ambos por parte de los representantes del gobierno y los trabajadores, por lo que se acordó un cuarto intermedio por 30 días, sin que se modifique la conducción actual de la empresa: esto es Horacio Fargosi, presidente, y Julio Alak, gerente general.

El impasse supuestamente es para que la Auditoría General de la Nación tenga tiempo para analizar los balances, uno de los supuestos incumplimientos por parte de los privados. Pero además se estableció el 31 de diciembre como último día para concretar el pase de acciones, por lo que ahora se inicia la verdadera negociación. ¿Será Austral parte de la negociación? No se sabe. De hecho, el mismo martes por la tarde el Secretario de Transporte convocó a los representantes de la empresa a una reunión en el Ministerio de Planificación. Allí fueron Fargosi y Vicente Muñoz.

¿PODRÍA SER LA EXPROPIACIÓN LA SOLUCIÓN BUSCADA?

Supuestamente podría no ser el mejor camino teniendo en cuenta que pondría en riesgo las relaciones entre España y la Argentina.

Salvo, como suponen algunos políticos, que esta solución forme parte de un acuerdo.

Resueltos algunos problemas legales, un pedido de expropiación acordado entre todas las partes, fortalecería la imagen del Gobierno que recibiría el apoyo de su propia tropa, la oposición, los empleados y los gremios frente a la "intransigencia" del Grupo Marsans.

Estos, ahora, se irían sin nada pero quedarían habilitados para iniciar una demanda ante el CIADI que les permitiría al cabo de dos o tres años -cuando otras sean las caras en el gobierno- llevarse un monto que hoy el Gobierno difícilmente esté en condiciones de conceder sin pagar un alto precio político.

¿Ciencia ficción? Es probable. Pero no deja de ser una alternativa que algunos miran de reojo


AEROLÍNEAS ARGENTINAS: ¿QUE ESTAMOS COMPRANDO LOS ARGENTINOS?

El informe de una consultora, cuyas iníciales son B y B, descansa sobre el escritorio de Ricardo Jaime, según reconocen en la Secretaría de Transporte.
El trabajo de esta empresa especializada en "business y marketing" advierte lacónicamente que Aerolíneas Argentinas, "en las actuales condiciones, es absoluta y totalmente inviable desde el punto de vista financiero, operacional, comercial y de recursos humanos, y bajo el poder sindical vigente. Sin cambios, implicaría la desaparición de la empresa en un plazo de entre 12 y 24 meses".

Según este trabajo, el déficit operacional mensual de la compañía es hoy de 34 millones de dólares, con una facturación durante el primer semestre de 94 millones y una deuda estimada en 1.000 millones.

Exceso de personal, flota antigua y heterogénea y baja aceptación en el mercado, tanto en internacional como en cabotaje, lo que la obliga a competir con bajas tarifas, son algunos de los rasgos sobresalientes. Pese al incremento de tarifas de hace unos meses y al subsidio a los combustible, aun así la mayoría de las rutas de Aerolíneas son deficitarias.

No es la propuesta de la consultora el único informe sobre Aerolíneas Argentinas y Austral que circula estos días por Buenos Aires. Otros trabajos realizados por especialistas en temas aeronáuticos -se desconoce si los mismos están sobre el escritorio del Secretario de Transporte, aunque difícilmente ignore sus conclusiones- permiten comprender la realidad de las compañías y sus posibilidades a partir de su nuevo status, ahora como empresa estatal.

Según estos informes, hoy el Grupo Aerolíneas/Austral se encuentra en una situación de profunda crisis comercial, operativa, financiera y organizativa. La baja competitividad en costos que hoy tienen ambas empresas limita en mucho su viabilidad a futuro.

¿TENDRÍA PROBLEMAS NUEVAMENTE AEROLÍNEAS CON SUS PROVEEDORES?

Si bien son cerca de U$S 200 millones los aportes del Estado nacional para mantener funcionando a Aerolíneas y Austral en los últimos dos meses, nuevamente los proveedores están inquietos por atrasos en los pagos.
La política del Grupo Marsans de ir soltando entregas a cuentagotas, especialmente cuando la situación apremiaba, llevó en distintas oportunidades a prescindir de algunos servicios esenciales, como por ejemplo cuando hace dos meses las agencias de viajes europeas se vieron impedidas de hacer reservas para vuelos de la compañía. Julio Alak, que asumió unos días después como gerente general, reconoció en el Congreso que de extenderse la medida le habría significado a la empresa resignar ingresos por 20 millones de dólares mensuales.
¿Podría repetirse la situación?.

Fuente de Consulta: Aviación News.-

No hay comentarios.: