El ejemplo de las autoridades de Turismo en Chile: Llaman a crear conciencia contra incendios forestales

Tanto nos cuesta imitar lo bueno?
Que hacen las autoridades de Turismo Local para generar conciencia en este sentido?

Veamos el caso de Chile

Un llamado urgente a toda la industria turística realizó el departamento de protección contra incendios forestales de Conaf a ayudar a prevenir nuevas catástrofes en el Parque Nacional Torres del Paine.
El jefe regional del departamento de protección contra incendios forestales, René Cifuentes, manifestó que “en este período se incrementa el peligro de sufrir un incendio forestal, en especial en aquellas zonas de alta concentración de visitantes como es el Paine”.
Por ello, dijo que, una labor trascendental, le cabe a quienes son parte de la cadena de atención de los turistas. Estamos hablando, dijo, de los agentes turísticos, hospedajes, restaurantes, guías de turismo, transportistas, entre otros, que “le informen a quienes nos visitan sobre los peligros que se corren con una actitud negligente”.
Durante el año se han realizado encuentros con los concesionarios y vecinos del parque, con la finalidad de realizar planes de preataque e incorporarlos de manera efectiva a la protección del parque.
Indicó que “como Conaf tenemos la primera responsabilidad en esta materia, pero es una tarea que debemos abordar entre todos, sino, lentamente iremos perdiendo una riqueza natural que a todos nos enorgullece y que es parte importante de la economía de la región y el país”.
Por ello dijo no se debe tener vergüenza en decirle a un extranjero, cuáles son las medidas de seguridad que “debe adoptar para no dañar nuestro patrimonio natural”.
HectAreas dañadas
Del año 80 a la fecha han ocurrido al interior del Parque Nacional Torres del Paine 47 incendios forestales, afectando una superficie aproximada a las 30 mil hectáreas.
En estos 28 años en sólo dos temporadas el parque se ha librado de sufrir daños producidos por el fuego.
Sin embargo son dos los grandes incendios que han producido mayor daño, los ocurridos en 1985 y el 2005.
Lo complejo es que en el período estival se producen condiciones atmosféricas por un lado y el estado de los combustibles que pueden generar factores decomportamiento extremo que por una parte favorecen el inicio de los incendios y dificultan su control. Ello técnicamente se denomina alta resistencia al control.
El éxito del control del incendio depende de la oportunidad de la detección y la contundencia del ataque inicial. Lo que no siempre es fácil por las grandes distancias y dificultades de acceso a sectores o zonas de montaña.
A raíz de lo ocurrido el 2005 se fortaleció el sistema de detección, se aumentó la dotación de brigadistas, pasando de 12 a 20 en el parque nacional y se incorporó equipamiento de última generación.
“Contamos con el equipamiento y personal para enfrentar un incendio forestal que se dé en condiciones normales”. Sin embargo hay comportamientos extremos, aclaró Cifuentes, que dificultan o sobrepasan las capacidades normales de respuesta. Ante ello la Conaf ha realizado alianzas estratégicas con otros entes de la comunidad. Destacó las brigadas contra incendios del Ejército, el convenio (en su momento inédito) con el Consejo Agrario Provincial de Argentina y en general con instituciones del sistema de protección civil.