30 agosto 2008

Alitalia va a la quiebra y crean una nueva compañía aérea totalmente saneada

Mientras el kirchnerismo en el Senado, que tiene mayoría en las comisiones, se dispone a firmar esta tarde el dictamen favorable al proyecto oficial de reestatización de Aerolíneas Argentinas, en Roma se ejerce la voluntad de la oposición argentina, que impulsa la quiebra de la empresa y la creación de una nueva aerolínea (postura que perdió en Diputados y con la que insistirán hoy): Alitalia se declaró en bancarrota (con la ayuda de Berlusconi) y crearon una nueva compañía totalmente saneada.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- ¿Cómo avanzó el gobierno italiano de Silvio Berlusconi sobre el rescate de Alitalia? Veamos:

> El plan es que entren al grupo estatal 16 grandes empresarios que invertirán unos €1.000 millones para sacar a Alitalia de la bancarrota. Los nuevos socios de la empresa que reunirá los activos y rutas de Alitalia, son Roberto Colaninno; el grupo Benetton, a través de la gestora de autopistas Atlantia; los grupos Aponte, Riva, Fratini, Ligresti, Fossati, Toto -dueño de Air One-, y Gavio. A ellos se une Equinox, Clessidra, Marcegaglia, Caltagirone Bellavista, Davide Maccagnani, el presidente de Pirelli, Tronchetti Provera, y el banco Intesa San Paolo.

> La deuda total es de unos €1.200 millones.

> Alitalia será intervenida por el gobierno y declarada insolvente. Traspasará todo lo rentable y productivo a una nueva empresa, la "Compagnia Aerea Italiana", que asumirá el negocio comandada por uno de aquellos empresarios, Roberto Colanino. Este empresario encabeza el grupo de 16 grandes patrones de la industria y las finanzas, entre ellos la familia Benetton, a quienes Berlusconi reunió para crear el grupo de socios de mil millones de euros para salvar Alitalia.

> Habrá recortes de personal, la reducción de la flota aérea de 238 a 153 aviones, la contracción de los vuelos intercontinentales (continuarán los vuelos a Buenos Aires por ser una escala productiva) para concentrarse en las cortas y medianas distancias, y pasará de los €805 millones de pérdidas previstas para este año a un superávit de 215 millones en 2013.

El consejo de administración de Alitalia proclamará la insolvencia de la compañía y nombrará un "comisario extraordinario" como interventor: el ex ministro Augusto Fantozzi.

Fantozzi no se ocupará de la sociedad 'viable' sino de la repleta de deudas y de actividades sin futuro, que será declarada en quiebra. Esto es, venderá todo lo bueno y productivo a la nueva compañía, y liquidará el resto del patrimonio de los viejos tiempos.

En tanto, el grupo comprador deberá mantener las acciones por un período mínimo de cinco años. Berlusconi prometió a los pequeños accionistas enterrados ahora con las acciones de la vieja Alitalia que serán "debidamente tutelados".

En cuanto a la oposición, también esgrimieron sus críticas. El líder del Partido Democrático, Walter Veltroni, afirmó que "en lugar de compañía de bandera tendremos una compañía de banderita".

La centroizquierda sostiene que el único plan de rescate era el que había elaborado el gobierno (anterior) de centroizquierda de Romano Prodi, que contemplaba la venta al grupo Air France-KLM. Las acciones de la compañía aérea francoholandesa, que es la mayor del mundo, subieron de golpe ayer en la Bolsa de París tras anunciarse que Air France-KLM va a entrar como socio minoritario en la nueva Alitalia.

Para ellos, el nuevo proyecto no funcionará si no se concreta una asociación con un socio internacional que ocupe un lugar de primera línea en el negocio aéreo a nivel mundial.

Sin embargo, para el actual mandatario, Silvio Berlusconi: "un gran país como Italia tiene que tener una compañía de bandera grande, sólida y eficiente". "Teníamos el deber de intervenir y lo hemos hecho". Los socios internacionales "entrarán sólo como socios minoritarios".

Por eso, el Gobierno allanó el camino para salvar a la aerolínea con la aprobación de un decreto y un proyecto de ley que modifica una norma usada en casos de quiebras de grandes empresas.

Las medidas modifican la conocida 'Ley Marzano', que prevé, entre otras cosas, el paso bajo administración especial de las empresas en crisis que operan en el sector de los servicios públicos. Según medios locales, el administrador extraordinario de una compañía en crisis puede proceder a una venta inmediata de activos aún rentables y el comprador de estos activos será elegido por el administrador extraordinario de la empresa.

La modificación de esta ley era uno de los supuestos para poder aplicar el Proyecto Fénix, que busca sacar de la crisis financiera a Alitalia separando las unidades que dan pérdidas de las rentables.

Otro punto del decreto contemplaría 'derogaciones' a la ley antimonopolio para impedir que la fusión entre Alitalia y AirOne -prevista en el plan de rescate- sea objetada por su dominio de la ruta Milán-Roma.

Ayer, un vocero de Air France-KLM aseguró que el grupo franco-holandés está dispuesto a comprar una participación minoritaria en la nueva Alitalia. El otro candidato es Lufthansa.

El texto prevé asimismo medidas destinadas a proteger a los empleados e indemnizar a los pequeños accionistas.

En cuanto al personal, Berlusconi y un par de ministros dijeron que se ha decidido proteger los réditos de los trabajadores que deban ser despedidos y cuyo número final se desconoce, dándoles varios tipos de subsidios por un plazo de siete años. También se les buscará trabajo en el sector privado.

La prensa local estima que habrá que suprimir 7.000 empleos. "La protección de los empleados concernidos no pasa sólo por garantías salariales durante siete años, sino también y sobre todo por un programa de reubicación en otras empresas del sector privado", subrayó un comunicado del ministerio de Trabajo.

El propio Berlusconi aseguró que el personal excedente "no será abandonado, porque no es justo que sean los individuos quienes paguen los errores de las gestiones anteriores", como tampoco lo serán los pequeños ahorradores que tiene acciones de Alitalia.

Mientras tanto, en la Argentina continúan hoy las presentaciones en el Senado por el futuro de Aerolíneas Argentinas y Austral.

Aquí, el proyecto oficialista es reestatizarla. En efecto, en la Cámara de Diputados se consensuó con sectores no kirchneristas cambios para aceptar el plan.

En cambio, la oposición legislativa que no acompañó el proyecto, básicamente la UCR y la Coalición Cívica, impulsa la quiebra de la empresa y la creación de una nueva aerolínea. Algo similar a lo que ocurre con Alitalia.

Pero esa postura perdió en Diputados y con ella insistirán esos dos partidos en el Senado, donde el kirchnerismo tiene mayoría.

En el Congreso se habló también de la posibilidad de "expropiar" Aerolíneas. Pero para el Gobierno eso no es posible en tanto esté vigente el acta acordada por el Estado y Marsans antes del debate legislativo.En ese acta, el Gobierno expresaba voluntad de compra y el holding español, de venta. En tanto, el punto de discordia sigue siendo la valuación de Aerolíneas y Austral, que incluye medir la deuda y el pasivo total.

Esta misma tarde, el oficialismo se dispone a firmar el dictamen favorable al proyecto oficial, y el objetivo es que el próximo miércoles se convierta en ley, sin ningún cambio respecto de lo aprobado por Diputados.

Así lo confirmaron fuentes del PJ a la prensa argentina, después de escuchar al gerente general de la empresa ahora gestionada por el Estado, Julio Alak, quien habló en el plenario de las comisiones de Presupuesto y de Infraestructura. Hoy -y tal vez el lunes y el martes- habrá nuevos invitados, aunque el dictamen ya estará camino de la imprenta del Congreso.

El jefe de bloque, Miguel Pichetto confirmó que votarán sin cambios, y que "será una clara muestra de la reconstrucción de la mayoría oficialista" en el Senado.

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