Buenos Aires, 4 ago (EFE).- La compleja situación de Aerolíneas Argentinas ingresó hoy en la agenda de diálogo político entre los presidentes de Argentina y Brasil, cuyo fabricante aeronáutico Embraer podría ser clave dentro del proceso de recuperación de la línea de bandera argentina. Fuentes diplomáticas confirmaron que el tema de Aerolíneas, que está en proceso de transferencia al Estado argentino de manos del grupo español Marsans, fue abordado en la reunión que mantuvieron en Buenos Aires el brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y la argentina Cristina Fernández.
El canciller brasileño, Celso Amorim, dijo que "hay interés" de parte de Argentina en comprar a la fabricante de aviones Embraer "una cantidad importante" de aeronaves.
"Hay interés también de que haya participación de Embraer en el mantenimiento (de los aviones). Existen conversaciones", dijo Amorim en declaraciones a la prensa de su país.
Sólo 30 de las 67 aeronaves que componen la flota de Aerolíneas están en condiciones técnicas para volar, lo que resulta insuficiente para cumplir con los compromisos de cobertura de rutas asumidas por la empresa, que controla el mercado doméstico de vuelos en Argentina.
Además, una veintena de aviones tiene una antigüedad promedio de veinte años y, según fuentes sindicales consultadas por Efe, renovar la flota de Aerolíneas y su subsidiaria para vuelos domésticos, Austral, costaría unos 400 millones de dólares.
Acudir a fabricantes que tradicionalmente proveyeron a Aerolíneas, como Boeing y Airbus, sería complicado para el Estado argentino, con dificultades para conseguir crédito en el exterior.
Por eso Embraer sería la apuesta más segura, de la mano de la alianza política entre Lula da Silva y Cristina Fernández.
El secretario argentino de Transporte, Ricardo Jaime, ya había adelantado este domingo que su país buscaría analizar con Embraer la posibilidad de incorporar aviones, ya sea por compra o por alquiler con derecho a adquisición (leasing).
"No sabemos si existe disponibilidad ni en qué tiempo. Veremos qué es lo más conveniente", señaló.
En la prensa local han especulado con que Embraer, cuarto fabricante mundial de aviones, tendría capacidad para proveer a Aerolíneas de aparatos de corto y mediano alcance, para vuelos domésticos y regionales, segmento en el que es líder mundial.
Marsans y el Gobierno argentino firmaron hace dos semanas un acuerdo por el que el grupo traspasará al Estado argentino el 94,41 por ciento de las acciones de Aerolíneas Argentinas y el 97 por ciento de Austral.
Con ese acuerdo se abrió un período de dos meses en el que se efectuará una auditoría interna para determinar el precio de las acciones que serán transferidas al Estado argentino, que ya posee una participación del cinco por ciento en Aerolíneas.
Un consejo de transición administra las dos empresas mientras confecciona el estado de resultados durante estos 60 días, hasta que se complete la transferencia accionarial, proceso que el Gobierno busca convalidar en el Parlamento.
Aerolíneas Argentinas tiene deudas por 890 millones de dólares y pierde cerca de un millón de dólares diarios, además de tener la mitad de su flota averiada, lo que complicó los vuelos por el país, incluso a muchos brasileños que han optado por pasar sus vacaciones en Argentina.
Pero al parecer la situación de Aerolíneas también disparó un tema de conversación en la reunión que Lula y Fernández mantuvieron hoy con su colega venezolano, Hugo Chávez.
Alicia Castro, embajadora de Argentina en Caracas y ex líder del sindicato de azafatas de Aerolíneas, explicó que esa reunión trilateral incluyó conversaciones sobre transporte, un tema nuevo en la agenda regional.
"La posibilidad de que Aerolíneas Argentinas quede en manos del Estado daría la posibilidad de hacer una alianza con la línea aérea estatal venezolana (Conviasa) y con la línea aérea de bandera designada por Brasil, de modo de tener nuestras Aerolíneas del Sur", comentó Castro.
La idea de crear una aerolínea suramericana ya venía siendo sugerida desde hace tres años como una "buena idea" por funcionarios venezolanos en charlas informales con la prensa, pero hoy comenzó a cobrar un tono más formal en las conversaciones a alto nivel entre Argentina, Brasil y Venezuela.
Fuente de Consulta: Gentileza Daniel Risetti
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