29 abril 2010

Se acabó la paz entre los gremios y Mariano Recalde

CIUDAD DE BUENOS AIRES (CÓDIGO AÉREO) - Demoras, postergaciones y suspensión de vuelos fue el resultado de las medidas de fuerza que tomaron la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA), la Asociación de Personal Técnicos Aeronautico (APTA) y la Asociación de Personal de Aerocomercial (APA).

La medidas de fuerza de cada gremios se realizaron casi en forma conjunta y en medio de la negociación salarial, lo que implica que el Presidente y Gerente General de Aerolíneas Argentina y Austral Líneas Aéreas, Mariano Recalde, resolvió cambiar poder por aumentos, es decir, una típica pelea entre empresas y gremios.

Desde que comenzó el enfrentamiento, el titular de APLA, Jorge Pérez Tamayo, niega que haya habido demoras o cancelaciones en los vuelos de Aerolíneas Argentinas y aseguró que "no hubo en ningún momento ninguna huelga", un trema del que sólo hablaron medios mal informados.

Sin embargo, Perez Tamayo aceptó que la designación del mexicano Andrés Fabre Robles como Coordinador del Plan de Transición provocó la renuncia de unos 50 instructores y jefes de línea pero "esto no tiene un efecto directo sobre los pasajeros".

"Desde el 7 de abril, cuando nos enteramos que iban a traer una persona extranjera para hacerse cargo de todo lo que es la parte de manejo operativo relacionado de manera directa o indirecta, lo que se hizo fue un mandato de asamblea de 310 pilotos de Aerolíneas Argentinas de lo cual la mayor cantidad de integrantes eran gente que tenían cargo, que tienen que trabajar de manera directa con esa persona", dijo.

"Lo primero que dijeron es que apenas se haga cargo un extranjero dada la experiencia que hemos tenido durante los últimos años con los extranjeros manejando pilotos, se decidió que todos iban a presentar la denuncia y eso fue lo que pasó", explicó.

"Fue un conflicto solamente de un mandato de asamblea, no fue una medida de fuerza fue tomada por 310 pilotos, con voto secreto y fue aprobado por unanimidad. Además, no tienen obligación de trabajar los pilotos cuando saben que una persona que está arriba no está de acuerdo con la operativa de la empresa con respecto a mantener la estatización de la misma", dijo.

El dirigente explicó que "la renuncia de estos pilotos no genera demoras" en los vuelos porque con su dimisión "el piloto de Aerolíneas Argentinas que tiene cargo pasa a ser comandante raso" con la consecuencia de que lo único que se paraliza son los vuelos de instrucción "y esto no tiene un efecto directo sobre los pasajeros".

La medida de APLA, con una manifiesta expresión de xenofobia que los pilotos reconocen y usan como argumento principal está dirigido a tomar el control del puesto que más desean tener dentro de Aerolíneas Argentinas: la Gerencia de Operaciones.

Por su parte, Mariano Recalde, aseguró que la prestación de los servicios por parte de la empresa es "normal" y que "los pasajeros no han tenido inconvenientes", en el marco de versiones según las cuales un conflicto gremial habría paralizado algunos vuelos.

Admitió que si bien "hubo algún reclamo (de parte de uno de los gremios), lo estamos solucionando a través del diálogo, y vamos a encontrarle una solución porque no hay ningún tema de fondo en discusión".

Explicó que "no hubo extrictamente un paro, han renunciado algunos pilotos con cargo jerárquico, y lo que hubo es una medida de fuerza encubierta, pero se normalizo la situación, están dejando sin efecto esas renuncias, y el pasajero no se afectó".

En cuanto al accionar del gremio, señaló "no sé que quiere el gremio de APLA, pero las decisiones en esta empresa las toman los miembros del Directorio, en general concensuadas con los gremios, y en este caso se había hecho, por lo que me llama la atención".

Por último expresó que "ya está solucionado el tema principal que son los vuelos. Después nos sentaremos a conversar y ver cómo seguimos avanzando en el mejoramiento de la empresa".

Pérez Tamayo sostuvo que "todo el personal de Aerolíneas Argentinas tiene que ser argentino y nativo", a lo que la compañía replicó que cuenta con "128 trabajadores extranjeros, solamente en Argentina", además de numerosos empleados en el exterior.

El dirigente gremial dijo que mientras Fabre Robles se ocupe del área de Producción de la compañía de bandera, los comandantes que renunciaron "no van a ir dando instrucción, sino que van a ir como comandantes rasos con copilotos habilitados".

"Hay gente que ha querido venir de México para imponerse en el área de Producción. En la República Argentina tenemos gente totalmente capacitada para estar allí", sostuvo.

Pérez Tamayo precisó que en ese puesto se está "a cargo de mantenimiento y operaciones, todo lo que sea la parte operativa de Aerolíneas Argentinas en lo que respecta a la parte de operaciones de pilotos y la parte de mantenimiento de aeronaves. Es el corazón de la empresa".

"Querían poner a una persona de origen mexicano. Cuando salió la ley se especificó bien claro que todo el personal de Aerolíneas Argentinas tiene que ser argentino y nativo. Los pilotos dijeron que iban a renunciar (a ser instructores) para no compartir la gestión de esta persona", prosiguió.

Entonces, cuando el problema con APLA parecía normalizarse, surgieron los problemas con la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas y la Asociación de Personal Técnico Aeronautico, extendido las demoras, postergaciones y anulaciones.

UALA emitió un comunicado de prensa en donde indicó que se declaró "el Estado de Alerta y Movilización ante el intento de reincorporación a la Empresa del Sr. Jorge Ballesteros, ex Gerente Corporativo de Operaciones y Área Técnica, despedido con justa causa por mal desempeño de sus funciones, poniendo una vez más en serio riesgo el normal funcionamiento de Austral Líneas Aéreas".

"Queda demostrado una vez más, que a pesar de la buena voluntad y cooperación de nuestro sindicato para que Austral se fortalezca y sea un factor importante en la recuperación de nuestros cielos, la irracionalidad prima sobre la cordura y la incoherencia sobre la planificación" agrega la comunicación.

En forma paralela, APTA sostuvo en un informe que "Ante la decisión de la máxima conducción de Aerolíneas Argentinas y Austral, conjuntamente con todos los miembros de su directorio designado por el Gobierno nacional Simeonoff Gustavo, Eduardo De Pedro, Juan Cingunegui, de reincorporar al despedido Lic. Guillermo BALLESTEROS, ex Gerente Corporativo de Operaciones y Área Técnica, hace siete meses separado de sus funciones por el actual Gerente de ambas empresas Mariano RECALDE, por incompetencia manifiesta y fundadas denuncias de corrupción"

"Una decisión consecuencia de la claudicación del Estado nacional a las extorsiones del gremio de pilotos APLA. A quien de hecho, le esta entregando el control y administración de Aerolíneas Argentinas y Austral. Lo cual, inexorablemente, terminaría llevando a la desaparición de ambas líneas aéreas", agrega.

Y concluye: "la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico se declara a partir de la fecha en Estado de Alerta y Movilización, no descartando ninguna acción sindical, incluidas todo tipo de medidas de fuerza, para impedir el fatal daño corporativo que generaría la falencia ética y el desatino empresarial de semejante reincorporación".

En pocas palabras, se acabó la paz social en Aerolíneas Argentinas y Austral Líneas Aéreas. Se verá si los funcionarios designados continúan en sus cargo, si se mantienen las medidas de fuerza y si un suculento aumento de sueldo puede calmar las aguas.

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