Muchas veces nos preguntamos como "manejar", en el buen sentido de la palabra, a nuestra juventud, en términos de orientación.
Basta repasar los diarios locales, un fin de semana, para darnos cuenta de una real problemática social que adolece de una política pública a modo de contención.
Por suerte, hay ejemplos para imitar y hoy quiero asociar en el recuerdo mi "belle époque" de colegio "secundario" en Jujuy.
Desde hace 56 años se viene cumpliendo religiosamente una Fiesta que INCLUYE a toda la juventud de nuestro país. Que plantea alternativas de sana participación y que enorgullece a todos los que deciden vivir esa experiencia de vida.
Por esa razón, en cada mes de septiembre, Jujuy es reconocida como la "capital nacional de la juventud y la primavera".
La Fiesta tiene verdaderos anfitriones.
Se trata de familias enteras que, por centenares, se movilizan cada año para la celebración. Motor de cada una de ellas... es el hijo o los hijos adolescentes decididos a vivir las emociones del constructor de carrozas de flores artesanales...y la hija o las hijas de la misma edad que sueñan con ser elegidas la reina de su curso, de su colegio, de su departamento, de la provincia o nacional, tales las instancias de esa gran parte de la Fiesta... pero que, si no se les da, se conforman con ser quienes fabrican las flores de papel, quienes forran la “falda” de la carroza o quienes integran la “presentación” de la obra de su colegio en los tradiciones desfiles alegóricos y quienes acompañan a las elegidas y corean sus nombres durante las elecciones y quienes cantan, bailan o actúan en los espectáculos centrales de la elección de las reinas.
Son familias enteras. Mamás, tías, hermanas, abuelas... que se ocupan de vestir a cada candidata a reina como princesa de un cuento de hadas, y papás que siguen todo con simpatía... desde el “pechazo” porque algo le falta a la carroza... o al vestuario de la chica... hasta la infinita paciencia que deberán tener para acompañar a la hija llegando a tiempo a desfiles y elecciones.
Como es una Fiesta, tiene protagonistas: los ESTUDIANTES. Por reglamento, alumnos regulares del ciclo medio (escuela secundaria).Por tradición, los que son alumnos de los últimos cursos. Son MILES y concurren a escuelas de todas las modalidades. MILES, con los que también simpatiza la familia jujeña, los educadores, el gobierno provincial y municipal, los funcionarios, los profesionales, empresarios y comerciantes... porque, en el caso de los jujeños especialmente, todos pertenecen a la Fiesta que, a la fecha, luce con orgullo 52 promociones.
Los niños en Jujuy juegan a ser “carroceros” y las niñas saludan como reinas antes de aprender a caminar, se dice. Y lo confirma otra celebración, en el mes de octubre: desfiles de “minicarrozas” en las que lucen reinitas y princesas.
Pero no crean Uds. que la FIESTA NACIONAL DE LOS ESTUDIANTES es sólo una expresión de lirismo o la oportunidad de encuentro para jóvenes de distintas latitudes que quieren divertirse.
Lo es, pero también entraña un verdadero proyecto educativo.
N/R: Opino con conocimiento de causa porque soy oriundo de aquella provincia y estoy convencido que se trata de un formato para importar a nuestra Tierra del Fuego.
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