Los legisladores de ARI le pidieron ayer al Tribunal de Cuentas que declare nulo el nuevo contrato entre el Gobierno provincial y la empresa concesionaria del Aeropuerto de Ushuaia, y que los funcionarios intervinientes en la negociación se hagan cargo con su propio patrimonio de los eventuales perjuicios al Estado. La gestión del actual Gobernador autorizó una obra de ampliación de la terminal por $19 millones, pero que se financia con un crédito blando de $11 millones otorgado por el Banco de Tierra del Fuego.
Además, se extiende la concesión hasta el 2027 y se autoriza un aumento de la tasa de embarque a $25 pesos por pasajero. Valor que la Provincia subsidiará, por ahora, a los residentes fueguinos (sic)
El negocio quedó cerrado el 27 de diciembre de 2006, cuando el Gobierno y la empresa London Supply acordaron la ampliación en un 65 % de la superficie cubierta del aeropuerto. Fue a través de un acta de recomposición contractual.
El Gobernador ratificó el acta a través del decreto 4879/06, firmado ese mismo día.
Según la presentación del bloque del ARI, todo el proceso estuvo plagado de irregularidades.
Los legisladores mencionan, por ejemplo, que la necesidad de ampliar la terminal surgió a raíz de la queja presentada por operadores turísticos (sobre la falta de espacio en temporada alta) y que ante ello, la reacción del Gobierno no fue reclamarle a la concesionaria, sino asegurarle una mejor rentabilidad a través de esta renegociación.
La presentación cuestiona que el propio Ministerio de Obras Públicas reconoció en el expediente la sobrevaluación de los trabajos a realizar (2000 mil dólares el metro cuadrado) y que sin embargo después suscribió el acuerdo.
Los funcionarios sospechan que por otro giro contractual, los fueguinos terminarán pagando la nueva tasa de embarque y por eso solicitan al organismo de control que requiera la suspensión de las nuevas tarifas.
Fuente de Consulta: Portal de Noticias "Botella al Mar"
N/R: Para seguir muy de cerca. Es un tema preocupante y sensible. También deberíamos analizar la vinculación contractual de las obras de ampliación por parte de AA2000 en el Aeropuerto de Río Grande. Si bien ahora tenemos una aeroestación más confortable, no deberíamos dejar de observar cuanto le costó al Estado Nacional, a fuerza de reclamos insistentes con el ORSNA.
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