Tanto Aerolíneas como Austral son sociedades anónimas que se rigen por la ley de sociedades comerciales. Como sucede en todas las empresas, los directores son nombrados por una asamblea de accionistas. Sin embargo, la ley que aprobó el Congreso mediante la que instruye al Ejecutivo a expropiar Aerolíneas y Austral faculta al Estado a hacer uso de los derechos políticos de Marsans mientras dure el proceso judicial.
En esa cláusula, se apoyará el directorio de la empresa para celebrar una asamblea de accionistas en la que no estará presente el dueño del 95% de las acciones. La asamblea aceptará la renuncia de Alak y propondrá como director a Recalde. Además, tendría que elegir otro director, ya que Héctor García Cuerva también habría renunciado para asumir un cargo en el Ministerio de Justicia.
Según confía el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, pasado mañana Recalde ya estará en funciones. Schiavi afirmó respecto de Recalde: "Tiene seriedad y calidad profesional". "Que no tenga experiencia en la administración es una cosa cuestionable, hay que dejarlo que se empape en los temas. Tiene calidad profesional", dijo a radio Mitre.
Por otra parte, el Gobierno dijo que la mitad de las millonarias pérdidas que se atribuyen a Aerolíneas son inversiones que no realizaba Marsans. "Lo que se anuncia como pérdida fue destinado a inversiones que no realizaron los administradores privados", dijo Alak, que presidió la compañía hasta el miércoles, cuando asumió como ministro de Justicia dentro de la reforma del Gabinete.
Fuente: Diario La Nación
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